viernes, 16 de marzo de 2012

MARILYN


Aprovechando el tirón de "Mi semana com Marilyn", que éstos días podemos ver en las salas españolas y cuya protagonista, Michelle Williams, ha sido nominada al oscar a mejor actriz principal, nuestro colaborador Simmon Said, nos habla un poco de la ambición rubia,de su amistad con el fotógrafo Milton Greene y de lo que se esconde tras su desparación.

Llevo dos días sin dejar de leer artículos y ver documentales sobre la vida de Marilyn. Creo que se me han saltado las lágrimas en tres ocasiones. He tenido la oportunidad de rememorar esas historias que durante mi larga adolescencia leí sobre ese Hollywood. Ahora con el tiempo y con cierta adultezzz sobrevenida (valga el término), dejo a un lado los mitos para entrar dentro de la Historia: en agosto cincuenta años de la desaparición de Marilyn Monroe... y alguien se cree a estas alturas que las cosas pasan porque sí. No sé si sería un presidente, un presidenciable, una envidiosa, una mala jugada del destino o una venganza, pero lo que sí creo es en su leyenda, en su memoria.


Milton, ayudó en todo lo que pudo, incluso a la hora de demostrar a la Industria que no era tan tonta como su tinte podía señalar o como sus gestos ingenuos y sensuales podían decir y equivocar. Lee Strasberg también colaboró desde el Actors Studio de New York (algo que no se puede decir de su esposa Paula, una loca controladora). Entre uno y otro le dieron el lugar que ella merecía, la respetaron, y Marilyn sacó lo mejor que tenía dentro. 

Milton, tuvo en infinidad de ocasiones a Marilyn entre sus manos y el objetivo, entre algunos de esos encuentros están las famosas "Black Sessions" (o Black Sitting) donde retrato a la rubia como lo que era, un bello animal lleno de matices:





En la última etapa de Marilyn, antes de su muerte, aquella noche de agosto de hace cincuenta años, el rodaje de su última película quedó inconcluso "Something's Got To Give". Algo así como su propia vida: ella se vengó de todos aquellos que la habían tratado mal, dejando a medias su vida (su película), para que nadie más pudiese aprovecharse, ni de su cuerpo, ni de su alma. 


Lee Strasberg dijo que ella sólo quería ser una actriz, no una estrella, que ella se sentaba en la última fila de su clase, y atendía con ahínco, y se esforzaba como la que más, ella ya había triunfado pero compartía ejercicios con los aspirantes a serlo, sin miedo, sin vergüenza, porque quería superarse, quería ser respetada. Su gran obsesión. Por eso, ahora la recordamos como una persona, no como un símbolo, no como un objeto, porque no lo fue y porque no lo es ahora y nunca lo será. 
 

Puedo afirmar que Norma Jane Baker, nuestra Marilyn, ha sido una de las personas que han dado sentido al Cine y en especial, a la visión romática y dorada que los nostálgicos (enfermizos) tenemos de ese Hollywood. Marilyn ¡claro que es buena actriz! no nos engañemos, lo que hacía lo hacía muy bien y eso es lo importante. Marilyn era bella y elegante como nadie y que a nadie se le ocurra decir lo contrario... 


Cuando Milton y Norma se conocieron, ella dijo divertida algo así como "pero si eres un crío" cuando vio la cara dulce e infantil Milton. A lo que él contestó "vaya, pero si eres una cría". Rieron y ahí empezó todo, ambos con veintitantos.

"MI SEMANA CON MARILYN"

Dirigida por Simon Curtis y protagonizada por Michelle Williams, Kennet Branagh y Eddie Redmayne, habla sobre un estuadiante de Oxford, Colin Clark, deja sus estudios de cine a un lado para trabajar como asistente en el set de "El príncipe y la corista", donde Monroe actuaba junto a Laurence Olivier.

Monroe, que por entonces acababa de casarse con el escritor Arthur Miller, conectará con el joven, y se dejará guiar por éste en los placeres de la vida británica, a lo largo de una idílica semana en la que Colin conocerá a la mujer detrás del mito, con sus inseguridades y deseos.






Milton Greene, el fotógrafo que ayudo a Marilyn a ser la mujer que quería ser, aunque fuese durante unos instantes, tras el objetivo de su cámara perdidos en su granja.
La Marilyn de la fanfasia era (y es) conocida por todos, rubia, sensual, provocativa y tonta (como la que le gusta a los buenos machos), pero Milton vio en ella algo más. Él nunca quiso sacar de ella el sexo, él estaba casado y ella en diferentes momentos también (con el garrulo de Dimaggio y el pedante y mal bicho de Miller) pero eso no impidió que tuviesen una relación íntima. Seguramente ni siquiera hubo sexo, para Norma el sexo era trabajo, y para Milton, en cierta manera, también. Es por eso por lo que tomaron precauciones, pusieron una lente fotográfica de por medio.
 

Marilyn fue una mujer que nunca tuvo un hogar al que volver, su infancia transcurrió de casa en casa y con abusos de por medio. Finalmente, la casaron con un policía simplón del que acabaría divorciándose al tiempo. Su estilo y su belleza le permitieron convertirse en modelo, luego en secundaria, y finalmente, en la amante de algún pez gordo, para así conseguir su ansiado objetivo: ser actriz

Todo a su alrededor empezó a girar muy rápido. Ella se convirtió en la estrella rubia y sensual del momento, un referente comercial del que todos querían sacar partido y si tocaban cacha, mejor. Ella se resignó. Sabía que los hombres iban a aprovecharse de ella y ella tendría que ceder por su condición de sumisa (por su condición de mujer). Poner el cuerpo era algo a lo que estaba acostumbrada. Sentía que ya que no la respetaban como mujer, que lo hiciesen como actriz.

Norma dejó a la Marilyn de los pechos turgentes en Hollywood y se fue a la granja de los Greene, junto con Milton y la esposa de este, Amy, durante una pequeña temporada. Necesitaba relajarse y vivir con una familia normal. Milton era conocedor de los cambios de ánimo de Marilyn (por su bipolaridad o trastorno maniaco-depresivo) por lo que la invitó a que se retirara durante un tiempo. Eso hizo, y durante esa estancia en Connecticut se llevaron a cabo algunas de las más memorables sesiones de amor fotográfico entre ellos. Milton quería de ella que simplemente fuese ella, sin , ARTTIFICIOS NI TRAMPAS.sostenes, sin ataduras, sin grandilocuencias. Y ella: maravillosa. 


TEXTO:SIMMON SAID


1 comentario: